En un Centro Quirúrgico Ambulatorio (ASC), el Programa de Aseguramiento y Mejora de la Calidad (QAPI, por sus siglas en inglés) va más allá de un simple requisito normativo: representa una hoja de ruta para fortalecer la seguridad del paciente y la calidad asistencial.

La Norma 04.00.01 de ACHC establece la obligación de contar con un programa QAPI continuo y basado en datos, mientras que la Norma 04.01.01 exige un plan anual que defina las actividades específicas orientadas a la mejora continua en todas las áreas. Este plan anual es esencial para orientar el programa QAPI, al identificar métricas clave y prioridades que pueden variar año con año. Un plan bien estructurado puede ser una herramienta poderosa para cultivar una cultura de excelencia. Sin embargo, la Norma 04.01.01 fue citada en el 23% de las inspecciones realizadas durante el último periodo de revisión de ACHC en Estados Unidos.

Programa vs. Plan: Dos Enfoques de la Calidad

El programa QAPI proporciona una visión integral del enfoque institucional hacia la calidad, y es una condición de cobertura (Condition for Coverage, CfC) establecida por los Centers for Medicare & Medicaid Services (CMS) en Estados Unidos. El plan QAPI, por su parte, es una guía anual que detalla las acciones concretas a implementar. Según la Norma 04.01.01, este plan debe ser revisado y aprobado anualmente. Durante esta revisión, el ASC debe analizar tendencias, establecer nuevas prioridades y ajustar las actividades de mejora según sus necesidades organizacionales.

¿Qué espera encontrar un inspector de ACHC?

Indicadores definidos y datos relacionados

Se deben identificar métricas relevantes tanto clínicas como operativas: tasas de infección, satisfacción del paciente, reportes de incidentes, costos de insumos, entre otras. El plan debe detallar el método de recolección de datos y su frecuencia.

Análisis de datos y acciones correctivas priorizadas

El plan debe describir los procesos para analizar la información y los parámetros que definen un desempeño aceptable. Se deben utilizar referencias internas o externas como punto de comparación. Cuando no se alcanzan los objetivos, el plan debe establecer prioridades de mejora, acciones correctivas y un cronograma para su reevaluación.

Supervisión y rendición de cuentas

Cada ASC puede asignar a un responsable con autoridad o un comité con representación clínica y administrativa para supervisar el programa QAPI. Este enfoque colaborativo fomenta el cumplimiento de los objetivos anuales. Las funciones incluyen aprobar el plan, revisar los datos y realizar los ajustes necesarios.

Errores Comunes

Los ASC que aprovechan al máximo su plan QAPI pueden mejorar significativamente la calidad del cuidado, la experiencia del paciente y la eficiencia organizacional. No obstante, los errores más frecuentes incluyen:

Omisión de indicadores para servicios contratados: Muchos planes no
contemplan métricas para servicios subcontratados.
Solución: realizar una revisión integral de los contratos e incluir indicadores
específicos.

• Indicadores irrelevantes o no aplicables: Algunos planes hacen referencia a
procedimientos que el centro no realiza.

Solución: asegurarse de que solo se incluyan procedimientos y servicios
efectivamente brindados por el ASC.

• Falta de especificidad en la recolección de datos: No se define cómo, cuándo
ni qué datos se recopilan.

Solución: especificar claramente la fuente, el método y la frecuencia de recolección
para cada indicador.

Escalando Resultados: Cuatro Estrategias Clave

1. Audite sus datos regularmente en todos los departamentos para mantener el enfoque en las áreas más relevantes y detectar oportunidades de mejora.

2. Establezca metas realistas, basadas en tendencias internas y puntos de referencia externos, para dar claridad al equipo y orientar sus esfuerzos.

3. Priorice áreas de alto impacto, como las de mayor riesgo o volumen, donde las mejoras pueden tener mayores beneficios para la seguridad y la calidad.

4. Implemente cambios de forma gradual, para facilitar una medición más precisa del impacto y evitar confusión en la evaluación de los resultados.

5. Capacitación Continua
La capacitación permanente del personal sobre la importancia de los indicadores de calidad y la correcta recolección de datos es esencial para asegurar que el plan QAPI se mantenga activo y funcional dentro de las operaciones diarias del ASC.